Según el barómetro de diciembre de 2011 del Centro de Investigaciones Sociológicas, con el fin de ahorrar dinero el 70% de los consumidores ha cambiado sus costumbres y las de su familia ahorrando más en ocio, energía, ropa, calzado y vacaciones. El 87% de los encuestados considera que la situación económica actual es mala o muy mala.

Ampliar imagenEl Centro de Investigaciones Sociológicas –CIS- lo deja claro: los consumidores españoles seguimos muy preocupados por la situación económica por la que atraviesa el país, y tratamos de ahorrar en todo lo posible con el objetivo de llegar a fin de mes.

Según el barómetro del CIS correspondiente a diciembre de 2011, con el fin de ahorrar dinero, la ciudadanía ha cambiado sus costumbres cotidianas. De esta manera, un 69’8% de los encuestados asegura controlar más el gasto energético en el hogar, el 69’9% ha recortado su partida económica destinada al ocio en general, un 66’1% ahorra en vacaciones y un 64’2% en prendas de vestir. Además, existe ya un preocupante 41’2% de los encuestados que dicen estar ahorrando también en alimentación.

Sería deseable que esta tendencia a intentar ahorrar por todos los medios, buscando las mejores ofertas, cambiando de compañía telefónica o de electricidad, se extrapolase también a los servicios financieros. Es aconsejable que el usuario de servicios bancarios recopile todas las comisiones que le cobra su banco o caja anualmente y que, llegado el caso, se plantee cambiar de entidad y ‘migrar’ a una que no le cobre comisiones. Puede suponer un ahorro de varios cientos de euros anuales.

Asimismo el 84’8% de la población, según el CIS, está bastante o muy preocupado por las cosas que le están sucediendo. Entre estas cosas tiene especial incidencia la situación económica general de España, que el 46% califica de muy mala, y el 41’2% de mala. Es más, sólo el 18’4% cree que esta situación habrá mejorado en diciembre de 2012 y un 22’4% de la población reconoce que su situación económica personal es mala o muy mala.

Es preciso que esta ‘depresión’ respecto a la situación económica se transforme en energía a la hora de defender los derechos sociales, laborales y económicos adquiridos hasta la fecha. Todos los consumidores que se sientan estafados, engañados o decepcionados con la situación actual tienen en sus manos la posibilidad de acudir a sus asociaciones de consumidores o de vecinos, asambleas de barrio del 15M,… con el objetivo de conformar un nuevo frente asociativo más social, participativo y reivindicativo.

La Banca, responsable de la crisis

El CIS también ha pedido la opinión de los consumidores sobre la responsabilidad de distintas instituciones o circunstancias en la situación actual de la economía española. En una escala del 0 al 10, en la que 0 significa que “no tiene ninguna responsabilidad” y el 10 que “tiene mucha responsabilidad”, los ciudadanos señalan que los bancos son los principales responsables de esta situación, con una ‘nota’ de 8’68.

Llama la atención en esta encuesta que en último lugar se sitúe el euro como responsable de la crisis, con un 6’94. La moneda única europea y sus férreas condiciones financieras y macroeconómicas, así como la rigidez institucional de los organismos que la gestionan, como el Banco Central Europeo, todavía no son percibidos por la ciudadanía española como responsable directa de la crisis. Una situación económica cuyo deterioro se ha prolongado merced a la mal llamada «crisis de la deuda soberana» y que ha llevado a la ciudadanía a soportar recortes de derechos y austeridad que impedirán el crecimiento.

Lamentablemente todavía no existe entre la ciudadanía y los consumidores una visión adecuada de la dimensión europea e incluso global de los problemas económicos, sociales y políticos. Una gran baza para los grandes lobbys financieros que se mueven a escala mundial y que hay que superar.