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Desde diciembre de 2010 la gran mayoría de las comisiones bancarias más comunes han experimentado un notable crecimiento, especialmente las más comunes: administración y mantenimiento de cuentas y tarjetas, descubiertos, o estudio de préstamos, que han aumentado entre el 3’9 y el 8%. Los consumidores cada día pagamos más por unos servicios que, sin embargo, continúan disminuyendo en cuanto a calidad.

Como viene advirtiendo ADICAE desde hace mucho tiempo, los consumidores estamos pagando la crisis de las entidades financieras a base de comisiones… entre otras cuestiones –prácticas abusivas, productos tóxicos,…-. Se trata de un aumento escalonado en el tiempo, que comenzó en 2006 y que desde 2009 ha cobrado velocidad. A pesar de la comprometida situación económica de millones de familias endeudadas en nuestro país, en muchos casos por culpa de malas prácticas bancarias, las entidades financieras siguen sin levantar el pie del acelerador y continúan sangrando a los consumidores por utilizar sus servicios más básicos.

En solo medio año todas las comisiones más habituales que ponen en práctica los bancos y cajas de ahorros españoles han aumentado. Y algunas de ellas lo han hecho de manera escandalosa:

Valor medio de las principales comisiones

Tipo de comisión

Diciembre de 2010

Mayo de 2011

Variación

Administración y mantenimiento de cuentas corrientes

22’36 euros

23’23 euros

3’9%

Administración y mantenimiento de cuentas de ahorro

21’73 euros

22’59 euros

4%

Estudio de crédito no hipotecario

0’85%

0’90%

5’8%

Cuota anual de la tarjeta de débito

17’30 euros

18’39 euros

6’3%

Descubiertos

3’94 euros

4’11 euros

4’3%

Estudio de préstamo hipotecario

107’24 euros

115’81 euros

8%

Fuente: Tabla de tarifas máximas, mínimas y medias del Banco de España de mayo de 2011.

Como queda reflejado en el cuadro, las principales comisiones han aumentado considerablemente. Y más teniendo en cuenta que, desde diciembre de 2010, el IPC únicamente ha subido un 1’4%, según datos del Instituto Nacional de Estadística. Destaca la de estudio de crédito hipotecario, que es sobre importe… lo que a la postre se convierte en un incremento de varios cientos de euros en cada operación. Y también hay que denunciar el elevado aumento de la comisión de descubierto –números rojos-. El incremento de esta última comisión demuestra que en tiempos de crisis, cuando menos dinero tienen las familias, más aprovecha la Banca para seguir engordando su lucrativo negocio.

También hay que señalar que el servicio que ofrecen las entidades bancarias continúa perdiendo calidad. La necesaria reestructuración del sistema financiero ha hecho, entre otras cuestiones, que disminuyesen las sucursales bancarias y, en consecuencia, se redujese el tiempo destinado a la atención al cliente que, además, debe esperar más tiempo todavía para ser atendido. La Banca está reduciendo gastos y esto es correcto, pero entonces también debería reducir los costes de su servicio y no al revés.

La comparativa es todavía más sangrante teniendo en cuenta las comisiones existentes en 2006, como ya denunció La Economía de los Consumidores en diciembre de 2010. Además, en cuanto a la modificación de las comisiones o nueva aplicación de las mismas por parte de las entidades bancarias, en los contratos indefinidos como es el caso de una tarjeta de crédito o de una cuenta corriente, bancos y cajas de ahorros pueden modificar de manera unilateral las comisiones o incluso incluir otras nuevas, siempre que lo comuniquen a los clientes afectados con una antelación igual o superior a dos meses.