Tan complejos y peligrosos como las participaciones preferentes, los productos de ahorro combinados o estructurados ligan la rentabilidad de nuestros ahorros a una serie de índices de referencia (Euribor, IBEX 35,…), a la rentabilidad de una serie de acciones en Bolsa, etc. Muchos ahorradores los contrataron creyendo que estaban adquiriendo un depósito a plazo fijo. Esta situación podría conllevar la nulidad del contrato por el acuerdo entre las partes, por error en el consentimiento, tal y como prevé el Código Civil en su artículo 1265 y 1266.