Aprende y vencerás 
ADICAE ha presentado su estudio “Nivel de educación financiera de los consumidores”, un documento que recoge las conclusiones de una encuesta realizada entre 2.240 consumidores de toda España con el objetivo de medir de manera objetiva el grado de conocimientos y experiencias en materia financiera que tiene la ciudadanía española. Este informe arroja que el 85% de los encuestados desearían tener más conocimientos, porque tres de cada cuatro han firmado alguna vez algún contrato bancario sin entender bien su contenido. El 27% de los encuestados reconoce que “nunca” entiende lo que le dice su banco, y otro 57% dice que solamente “en ocasiones”.
Debido a la falta de normativa eficaz de protección, el principal arma que les queda a los consumidores para evitar fraudes y hacer valer sus derechos es el conocimiento, una materia pendiente en España, donde el 85% de la población asegura que le gustaría recibir más formación financiera. Para conseguir que los usuarios sean críticos con la información que reciben de su entidad bancaria y tomen decisiones que no perjudiquen sus propios intereses hoy en día cada vez es más necesario tener una sólida cultura financiera.
Algo que se pone de manifiesto en el estudio “Nivel de educación financiera de los consumidores en España”, un detallado informe que recoge los resultados de una encuesta elaborada por ADICAE y realizada entre 2.240 consumidores, que recoge entre otros muchos este dato remarcable: El 73% de los encuestados asegura haber firmado algún contrato de algún servicio financiero sin haber entendido su clausulado. Y ello es así porque en la mayor parte de las veces no comprenden lo que el banco les dice; el 27% de los encuestados confiesan que no entienden la información de su banco “nunca”, y otro 57% asegura que sólo la comprenden “en algunas ocasiones”.
Un resultado que confirma la inquietud de ADICAE por esta cuestión, tal y como reconoce el presidente de ADICAE, Manuel Pardos. “La educación financiera se está poniendo en primer plano en España debido a los problemas financieros actuales, como el fraude de las preferentes, las subordinadas y demás productos tóxicos que han causado daños y casi la ruina a millones de familias. Los desahucios también han sido un problema derivado de esto. Más de 1 millón de familias han tenido que abandonar sus casas por no pagar sus hipotecas u otros créditos, de los que se habla menos pero también son causantes de deudas en las familias. Esta situación ha producido un gran escarmiento entre los consumidores a nivel de calle, donde hay una gran desconfianza en las entidades financieras”.
Sin embargo, dice Manuel Pardos, “las entidades están pensando en seguir igual. Están esperando que la gente tenga trabajo y dinero para vender hipotecas, créditos, etc. Se han ido de rositas y piensan seguir el mismo camino que han estado siguiendo desde antes de la crisis”. Y por ello “pedimos a las instituciones apoyo a los programas de educación financiera, pero no de una manera cínica como la del Banco de España. El objetivo de ADICAE es crear consumidores críticos y responsables para que sean mejores clientes, porque la educación que recibían los consumidores era la que ofrecían los vendedores de los bancos, y todos sabemos cómo ha acabado eso”.
El papel del personal de los bancos
El personal bancario no está formado tampoco. Así lo manifiesta la socióloga Ana Bernabéu, coordinadora del informe, que señala que “de cada tres encuestados, uno revela que el personal bancario le aclaró alguna duda; otro que no le aclaró las dudas; y el último que le confundió aún más. Entre los encuestados, los que tienen una baja educación financiera creen que la mejor opción es acudir a charlas y talleres impartidos por personajes objetivos. Entre los que ya tienen un cierto nivel, prefieren leer libros, consultar autores, textos, etc”.
Y confirma una tendencia que sigue siendo preocupante. “En cuanto a las reclamaciones, a la hora de defender sus derechos, solo un 20% de los consumidores encuestados acierta el itinerario a seguir para una reclamación. El sistema de reclamaciones es un gran desconocido para los consumidores. Y más de la mitad consideran además que los organismos de reclamación no aportan nada”. Ideas que revelan hasta qué punto se hace necesario incidir en la labor de formación y educación financiera para prevenir futuros fraudes a los consumidores.
Jornadas en Zaragoza
ADICAE sigue en ello, y organiza las “Jornadas de Educación Financiera de los consumidores; retos y perspectivas para elevar la cultura financiera en España” que tendrán lugar el 16 y 17 de diciembre en el centro Pignatelli de Zaragoza (Paseo de la Constitución, 6), y cuya inscripción es gratuita. En estas sesiones participarán como ponentes catedráticos y profesores universitarios, juristas, economistas, portavoces de la CNMV y el Banco de España y representantes de entidades financieras, con el fin de aportar una visión global del nivel de cultura financiera en nuestro país y extraer propuestas para elevarlo. La asociación está apostando fuerte; su aula online,http://educacionfinanciera.adicaeonline.es/ es buena prueba de ello y ha atraído ya la atención de casi 2.000 alumnos.
Entre los participantes de las jornadas, Dª. Milagros Yagüe, subdirectora general de Arbitraje, Normativa y Asociacionismo del Instituto Nacional de Consumo, o el director general de Consumo del Gobierno de Aragón, Sergio Larraga. Posteriormente se analizará el “Plan de Educación Financiera” puesto en marcha por El Banco de España y la CNMV, a juicio de ADICAE insuficiente para atajar el déficit formativo en esta materia, para lo que contaremos con la presencia de Dª. Rosario Sánchez, representante de Mercado de Valores de la Generalitat de Cataluña. También relacionado con este tema tendrá lugar un debate sobre la educación financiera impartida por los bancos, con el título de “¿formar al consumidor o fidelizar al cliente?”
Estas jornadas se enmarcan dentro del proyecto de ADICAE “Educando a los usuarios de servicios financieros: por un nuevo consumidor responsable, activo y crítico”, apoyado por el Instituto Nacional de Consumo.
